El uso de Goo Gone es una forma rápida y efectiva de eliminar cintas, crayones, pegatinas, maquillaje, cera, grasa y otros líos pegajosos. Si bien el residuo que queda de este producto es de olor fuerte y grasiento, se puede limpiar con bastante facilidad solo con agua y jabón. No es necesario utilizar productos químicos agresivos y potencialmente dañinos.
Paso 1
Absorba el exceso de Goo Gone inmediatamente con un paño blanco. Esto evita que el producto gotee por la pared y propague el desorden.
Paso 2
Lave el Goo Gone de las paredes lo antes posible para evitar dejar una mancha de grasa.
Paso 3
Use un paño blanco limpio para limpiar el desorden pegajoso y absorba la mayor cantidad posible de Goo Gone.
Paso 4
Con un paño blanco limpio, limpie la pared con un detergente suave y agua. Limpie suavemente, en lugar de fregar, para evitar raspar la pintura de las paredes.
Paso 5
Seque la pared mojada con una toalla y espere a que el área se seque completamente antes de repetir el proceso. Remojar la pared con agua y jabón puede suavizar la pintura y arruinar el trabajo de pintura. Si aún queda residuo de Goo Gone en la pared una vez que se haya secado, vuelva a limpiar con la mezcla de agua y jabón.
