Cómo proteger el concreto recién vertido de la lluvia

Pin
Send
Share
Send

Después de verter una superficie de concreto, es fundamental que no se moje para que pueda secarse y curarse a toda su fuerza. Si el concreto no está completamente seco y se espera lluvia, tome medidas inmediatas para proteger el concreto hasta que la lluvia disminuya. El hormigón sin protección puede desarrollar depresiones y hoyuelos por las gotas de lluvia y si se produce demasiada lluvia, deteriora la composición del hormigón. La protección adecuada se puede lograr con suministros de trabajo estándar.

Proteja el concreto de la lluvia para evitar hoyuelos.

Paso 1

Ubique láminas de polietileno o arpillera y estírela sobre toda el área de concreto húmedo extendiéndola sobre los bordes al menos 6 a 12 pulgadas para evitar que la lluvia salpique debajo de ella. Asegúrese de que ninguna parte del concreto esté expuesta.

Paso 2

Coloque tablas de madera o ladrillos alrededor del perímetro del plástico o arpillera para evitar que se vuele si se producen fuertes vientos junto con la lluvia.

Paso 3

Espere hasta que cese la lluvia y retire la cubierta del concreto inmediatamente para permitir que el concreto continúe secándose.

Paso 4

Examine la superficie de concreto para ver si se acumuló agua de lluvia a pesar de las precauciones. Si hay agua de lluvia, retírela con una escoba y apenas tocando la parte superior del concreto con las cerdas. Deje que toda el agua se evapore por completo de la superficie antes de continuar con el proceso de instalación o trabajos de construcción adicionales.

Pin
Send
Share
Send